Si eres del tipo de persona que disfruta presenciar los diferentes e increíbles acontecimientos que suceden en el universo, seguramente estarás interesado en conocer la fecha exacta en la que todos los mexicanos podrán ser testigos de un suceso que solo es posible ver cada 70 años.
Se trata de la aparición en el cielo de un meteorito gigante que lleva por nombre Cometa Diablo; este cometa, cuyo nombre original es 12/P Pons-Brooks, ha sido estudiado desde hace décadas y si bien tendrá cierta cercanía con el planeta Tierra, su trayectoria no interferirá con el planeta azul y tampoco provocará daños al medio ambiente.
¿Qué es el cometa Diablo y cuándo podrá ser visible?
De acuerdo con el Jet Propulsory Laboratory de la NASA (JPL) se trata de un cuerpo celeste que entra en la clasificación de cuerpos celestes tipo cometa Halley. Esto quiere decir, que ya tiene una órbita definida y estudiada, por lo que no tiene forma de rozar con la trayectoria terrestre.
El investigador principal del Grupo de Meteoritos, Cuerpos Menores y Ciencias Planetarias, del Instituto de Ciencias del Espacio (ICE – CSIC), Josep M. Trigo, menciona que el núcleo del cometa Diablo mide tres veces el tamaño del Monte Everest. Agregó que ya ha dado muestras de su cercanía al planeta Tierra.
“En estos últimos meses, conforme se aproxima al Sol, hemos asistido a varios estallidos en su luminosidad, en los que súbitamente ha incrementado su brillo cientos e incluso miles de veces.” Escribió el especialista para The Conversation.
Y de acuerdo con los cálculos que han hecho los especialistas, el paso del cometa 12/P Pons-Brooks podrá ser visible el próximo 21 de abril de 2024, tiempo en el que alcanzará su proximidad máxima al Sol.
Josep Trigo aseguró que, si bien su punto más alto será visible en las últimas semanas de abril, el cometa Diablo se dejará ir viendo desde meses antes. Según los cálculos del investigador, a partir de febrero 2024, podrá apreciarse en su paso por la bóveda celeste. En marzo, ganará más vigor. Cuando alcance el perihelio (o esté más cerca del Sol), su luminosidad podría incrementar en millones de veces.
Finalmente, comenta que no será necesario utilizar binoculares o un telescopio para poder observarlo, pues según sus palabras será visible con el ‘ojo desnudo’. No obstante, advirtió que en México, debido a la geometría desde la que se contempla su proximidad, “solo nos permitirá verlo unas pocas horas en el cielo vespertino y matinal”, concluyo.