El atole es una bebida que se consume desde la época prehispánica y como actualmente en México estamos en temporada de lluvias, ya sea en la mañana o en las tardes, siempre se antoja disfrutarlo bien calientito con un pan de dulce. Hoy sabrás cómo hacer atole de garbanzo para compartir durante los días lluviosos, la receta tradicional de Sonora.
El atole de garbanzo tradicional surge como una forma de combatir el hambre y porque esta leguminosa se daba mucho en Sonora, los pobladores lo tostaban y molían hasta obtener un polvo fino muy parecido al pinole, al que mezclaban con agua, piloncillo, clavos y canela para obtener esta bebida aromática, deliciosa y nutritiva.
Ingredientes
Para 4 personas
1 taza de garbanzos cocidos (pueden ser garbanzos enlatados o previamente cocidos)
4 tazas de leche (puedes usar leche de vaca, almendra, soya, o la que prefieras)
1/4 de taza de azúcar granulada (al gusto)
1 rama de canela
1 cucharadita de extracto de vainilla
Canela en polvo
Cómo hacer atole de garbanzo
Dificultad: Fácil
Tiempo total
20 m
Elaboración
10 m
Cocción
10 m
Si los garbanzos no están cocidos, asegúrate de remojarlos una noche antes para garantizar su cocción y de cocinarlos previamente. También puedes usar garbanzos enlatados, enjuágalos bien y escúrrelos.
En una licuadora, agrega los garbanzos cocidos y un dos tazas de la leche de tu preferencia. Tritura hasta obtener una mezcla suave y homogénea. Durante este paso puedes colarlo, ya que es importante para que el atole tenga una textura suave y sin grumos.
En una olla grande, vierte la mezcla de garbanzos molidos y agrega el resto de la leche. Añade una rama de canela para darle un toque aromático.
Calienta la mezcla a fuego medio y remueve constantemente para evitar que se pegue al fondo de la olla.
Cuando la mezcla esté caliente y comience a hervir, agrega el azúcar y sigue removiendo para que se disuelva completamente.
Si deseas darle un toque de sabor extra, agrega una cucharadita de extracto de vainilla y mezcla bien.
Cocina el atole a fuego medio-bajo de cinco a diez minutos adicionales para que tome un poco de espesor. Si prefieres una consistencia más espesa, puedes cocinarlo por más tiempo y no olvides remover. Retira la rama de canela y apaga el fuego.
Sirve el atole de garbanzo caliente en tazas y espolvorea un poco de canela molida en la parte superior.
El atole de garbanzo es una excelente opción que puedes disfrutar en el desayuno o la merienda debido a su alto contenido de proteínas y su sabor reconfortante. ¡Que lo disfrutes!.