El corrido del “Moro de Cumpas”, es uno de los más famosos del estado de Sonora
Tomado de: Vanguardia
Cada región del norte de México es rica en historias y leyendas, algunas de ellas se han vuelto inmortales, gracias a los corridos.
Como es el caso del corrido del “Moro de Cumpas”, que es uno de los más famosos del estado de Sonora y cuenta la historia de un caballo célebre de ese municipio ubicado en el centro del estado.
Y se centran en el día en que el Moro se enfrentó en una carrera contra el Zaino de Agua Prieta y lamentablemente perdió.
Esto sucedió, el 17 de marzo de 1957, cuando el Moro tenía 27 años, y era propiedad de Pedro Frisby del rancho Tres Nogales.
Su hija, María Frisby, escribió un libro sobre la historia titulado: “El Moro de Cumpas, Historia de un caballo muy querido”, y en el cuenta que su padre lo quería mucho y que era un caballo muy brilloso e inquieto.
Pedro Cruz, entrenador del caballo, se lo llevó a Agua Prieta para entrenarlo y conseguirle carreras. Ganó 14 carreras grandes y solo perdió cuatro.
El jinete que lo corrió en la icónica carrera, “Chendo” Valenzuela, era un vaquero del rancho Tres Nogales, donde María nació y sigue siendo propiedad de la familia Frisby en Cumpas.
El Zaino de Agua Prieta, como también se le llamaba al Relámpago, era de Rafael Romero, propietario de Copacabana Club, el famoso centro nocturno frente al que se realizó la carrera.
El corrido, escrito por el aguapretense, Leonardo Yáñez ‘El Nano’, “cayó en manos del ‘Sahuaripa’ (Gilberto) Valenzuela, que se lo llevó a México y se lo presentó a Rubén Fuentes (había sido violinista del Mariachi Vargas de Tecalitlán). Él le dio los últimos toques”.
Después, además del “Sahuaripa” el tema fue interpretado por Antonio Aguilar -quien protagonizó la película filmada cerca de Tecate, Baja California-, así como por Vicente Fernández, Chayito Valdez, Lucha Villa y La Original Banda El Limón, entre otros.
Pedro Frisby falleció repentinamente en diciembre de 1972, víctima de un ataque cardiaco, a los 51 años. Dos meses después, el 23 de febrero de 1973, el Moro, viejo y enfermo, fue sacrificado.